Desde que la Convención de 29 de mayo de 1937, con respecto a la concesión para emitir la libra libanesa llegó a su fin en 1963, el Líbano decidió crear un banco central. El Código de Dinero y Crédito fue promulgado por el Decreto Legislativo N.o 13513 de 1 de agosto de 1963. Estableció el Banque du Liban como una persona moral del derecho público, conferida con el privilegio de emitir la moneda nacional.